Este mes de mayo se celebró el Día Mundial del Celiaco, y como desde hace 1 año por temas de salud tuve que iniciar a vivir una vida libre de gluten quiero contarte mi experiencia como persona y no como profesional.
Primero lo primero... El gluten es la proteína presente en el trigo, avena, centeno y cebada (TACC). Sin embargo, a pesar de que hay muchos alimentos que por su naturaleza son libres de gluten, existe algo llamado CONTAMINACIÓN CRUZADA que hace que cualquier alimento pueda estar tener gluten (en menor o mayor cantidad).
Quiere decir que por ejemplo el arroz, los frijoles y las carnes (por citar algunos alimentos) que naturalmente no tienen gluten podrían tenerlo si la cocina en la que se preparan los alimentos sin gluten también prepara otros alimentos que sí tienen gluten sin tener los cuidados necesarios para prevenir la contaminación, y entonces quien no pueda consumir gluten se puede ver afectado al consumir esos alimentos (que naturalmente no tenían gluten pero fueron contaminados en la cocina).
Y esta contaminación puede ser mínima para vos, pero en personas sensibles a esta proteína o celiacas, esa contaminación se vuelve un riesgo para su sistema inmune.
Y cuando hablamos de contaminación cruzada no solamente se refiere a las cocinas de los restaurantes o sodas, también nos referimos a tu cocina, ya que algunas veces la persona podría haber eliminado por completo las comidas fuera del hogar sin ver mejoras importantes, sin saber que la contaminación sigue en su cocina en pequeños detalles.
Y es por eso que Priscilla Jaikel de Salutem nos dió algunos consejos para prevenir la contaminación cruzada en casa:
En la medida de lo posible, si es un hogar con pocas personas, lo mejor sería eliminar por completo los alimentos con gluten.
Los utensilios de la persona que no puede comer gluten deben estar separados de las personas que sí pueden consumirlos (platos, cucharas, vasos etc).
Leer muy bien las etiquetas y asegurarse que todo sea certificado.
Desinfectar muy bien las superficies donde se van a preparar los alimentos libres de gluten.
Revisar si los restaurantes donde estamos consumiendo los alimentos pueden asegurarnos los cuidados necesarios para prevenir la contaminación cruzada.
Pero hablemos del diagnóstico, porque justamente al ser la enfermedad celiaca una afectación al sistema inmune (pudiendo afectar cualquier órgano o tejido) esto vuelve difícil identificar sus síntomas y por lo tanto su diagnóstico. Y existe una sola cosa que va marcar la diferencia en ese diagnóstico: ¡VOS!
Y es aquí donde entro a contarte mi experiencia personal:
Durante toda mi vida experimenté síntomas que llegué a normalizar, los hice parte de mí, y me decía cosas como: "no importa los hábitos que tenga, yo siempre voy a ser estreñida", "de la nada me dan diarreas" o "ningún medicamento logra regular mis ciclos menstruales".
Y fue el mismo sistema de salud el que me reforzó esos pensamientos ayudándome a normalizarlos, porque cada vez que por alguna situación asistía a que me valoraran me terminaban diciendo cosas como: "te voy a enviar fibra porque seguramente eso es lo que causa tu estreñimiento" a pesar de que yo sabía que por mi alimentación y estilo de vida era imposible que fuera falta de fibra, o "vamos hacerte una prueba de embarazo porque los desmayos recurrentes podrían ser eso" SÍ!!!! DESMAYOS!!!! asistí al menos 3 veces en un periodo de 2 semanas al hospital por desmayos sin motivo aparente y todo lo que hacían los médicos que me recibían era una prueba de embarazo y anemia y terminar diciéndome "tenés un umbral del dolor muy bajo, por eso te desmayas por cualquier cosa" (claro que les estoy hablando de hace más de 10 años cuando aún era estudiante universitaria, si hoy es difícil de llegar a este diagnóstico hace más de 10 años era peor).
Finalmente, hace alrededor de 2 años, comencé a tener más problemas de la piel, manchas que por más tratamientos y cremas que coloqué en lugar de disminuir aumentaban, y fue ahí cuando me dije: "ok, vos sos profesional en salud y además nutricionista, así que manejas uno de los temas que más favorecen o perjudican la salud en todo sentido, comencemos a eliminar alimentos hasta encontrar qué te está perjudicando."
Inicié con los lácteos, seguí con el huevo, luego fue el tomate y las semillas, probé incluso con los pescados, y para mi felicidad no resultó nada de eso (digo felicidad porque todos esos alimentos me encantan). Finalmente le tocó el turno al gluten, y lo primero que noté fue las manchas en mis brazos, como por arte de magia comenzaron a disminuir.
Lo segundo que noté fue mi sistema digestivo, el estreñimiento comenzaba a desaparecer, comencé a ir al baño con más regularidad, por lo tanto la inflamación abdominal disminuyó, las diarreas "sin sentido" desaparecieron, mis ciclos menstruales se volvieron regulares (desde adolescente sufrí de amenorreas y quistes en los ovarios, resulta que es otro de los síntomas por celiaquía) y los desmayos NUNCA MÁS SUPE DE ELLOS!
Luego comencé a reintroducir el gluten con total consciencia (casi que una vez al mes) para identificar el síntoma que mi cuerpo externaba y terminar de concluir si era el gluten o algún ingrediente presente, y ahí pude conocer que todos esos síntomas con los que había aprendido a vivir no era más que una manifestación de mi consumo de gluten.
Fue solamente con este proceso de CONSCIENCIA Y AUTOCONOCIMIENTO que logré entender la forma en la que funciona mi cuerpo y la forma en la que reacciona diciéndome "esto no está bien, esto no es normal"
Te cuento mi historia en lugar de recitarte la teoría porque TODOS necesitamos aprender a conocernos, el sistema de salud nos ha acostumbrado a que es el profesional de salud quien tiene la última palabra y quien tiene todo el conocimiento sobre tu cuerpo, pero te tengo una noticia: La única persona que tiene TODO EL CONOCIMIENTO SOBRE SU CUERPO SOS VOS!!!
Claro que los profesionales en salud tenemos herramientas y conocimientos que pueden nutrir tu bienestar, pero solamente somos un instrumento hacia ese bienestar, vos sos quien nos va indicando si estamos en el camino correcto o si debemos cambiar de dirección.
Quiero que mi historia te sirva no solamente con el gluten sino con cualquier otro síntoma que tengas en tu vida y estés apropiándote de él diciéndote: YO SOY ASÍ Y ES NORMAL.
Quiero que sepas que NO ES NORMAL sentirse mal (física o emocionalmente) y si te estás sintiendo así es solamente tu cuerpo queriendo decirte que algo está pasando y es tu deber con mucho amor propio y sin juzgarte escuchar tu cuerpo y aprender a conocerlo.
Finalmente hoy puedo decirte que ya reconozco cuando mi cuerpo intenta hablarme, no al 100%, es un proceso lento, pero al menos no ignoro sus señales: cuando tengo hambre, frío, calor, estrés, ansiedad, cuando necesito descanso, cuando quiero dormir todo el día o cuando quiero dormir menos, o cuando necesito movimiento.
Y como quiero que vos también vivas este camino de autoconocimiento y que te apoyés en aquellas empresas que pueden hacerte el camino más fácil es que me he unido junto a SALUTEM para brindarte un 20% de DESCUENTO en sus productos con el código: NUTRIENDOMIBIENESTAR.
Salutem es una empresa que se encarga de vender comidas preparadas 100% libres de gluten y libres de contaminación cruzada. Y podés ir a comprar sus productos enviando un mensaje al WhatsApp: 7206-7265.
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